Queridos amigos:
En primer lugar quiero dar mi más sincero
agradecimiento a todas las personas que públicamente o en privado me han
mostrado su apoyo en estos días. Si de algo me va a servir lo que ha ocurrido,
es para constatar lo querido que uno puede llegar a sentirse; reitero de nuevo
mis gracias y os mando un abrazo que espero poder dar en persona a todos y cada
uno de vosotros.
Los que me conocen bien (y creo que también los que
no me conocen tanto) saben que soy una persona que siempre he practicado el
diálogo como medio para llegar a un acuerdo o solucionar un problema, y que la
violencia no se encuentra entre mis valores, como tampoco se encuentran los
insultos ni los malos modos. Quiero deciros que, dentro de la vorágine que este
infame suceso ha provocado, estoy viviendo esta situación con la tranquilidad
del que se sabe INOCENTE de toda acusación. De la misma manera que se ha hecho
pública una versión de los hechos (que muchos han dando por válida "porque
sí"), y una denuncia, quiero dejar claro que existe otra versión, la que
esclarecerá LA VERDAD, y otra denuncia, que entiendo que ha de quedar en el
ámbito privado hasta que un juez tome cartas en el asunto. Es por eso que yo no
enviaré mi denuncia a ningún medio de comunicación, ni tampoco daré mi versión
de los hechos nada más que delante de un juez, pues considero que tales
decisiones no harían sino agravar esta situación.
Por el contrario, PIDO A TODOS LOS PROVENCIANOS,
votantes o no del Partido Popular, que en la medida de lo posible desterremos
de nuestro día a día las discusiones por política, las provocaciones y los
enfrentamientos que no van a ninguna
parte, pues no es momento para el odio y sí para la concordia. Todos hemos
nacido de madres y padres que son o han sido vecinos o amigos de este pueblo,
EL PROVENCIO. Otros han llegado de fuera y han decidido quedarse pues ya
sienten el pueblo como suyo propio. Todos tenemos un corazón y unos valores que
no podemos tirar por tierra en base a unas ideologías políticas que han de ser respetadas.
Por tanto, invito a los afiliados del Partido Popular, a sus simpatizantes,
familiares y amigos, así como al resto de vecinos de El Provencio, a que hagamos
un pacto de respeto mutuo y a que convivamos en armonía. Nuestro lema es
"Todos juntos hacemos un pueblo" y así me gustaría que continuara
siendo.
Atentamente,
Gregorio Osma Sevilla
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